Conocí a Poppy en el 2010. Trabajaba en Mimosa como diseñadora de moda y yo como limpiadora y babysitter en casa de los jefes de Mimosa, David y Amanda como ya he comentado en algún post anterior.
Al cabo de un año, gracias al sponsor, tuve el placer de compartir oficina con ella e incluso fuimos compañeras de casa. Poppy es una australiana de 39 años, llena de energía, amante de la moda, del surf y del deporte en general. Súper divertida. Desde entonces, nos une una bonita amistad.
Le encanta pasar fines de semana surfing y de camping perdida por los parques nacionales. Es una auténtica aventurera y, ahora también, emprendedora. Acaba de empezar su propia marca de ropa de chica para surfear. Se llama Tall Poppy 🙂 Mola un montón! Me ha regalado un par de ‘one pieces’ y unos bikinis que son TOP. Buena calidad y, lo mejor de todo, no se mueven.
Cogimos la furgo de Dan, amigo de Poppy y nos dirigimos unos 250 – 300KM al sur de Byron Bay. Me encanta irme con Poppy porque conoce todos los secret spots. Era la primera vez que íbamos juntas a esta playa. Estaba bastante escondida, no recuerdo el nombre. Tuvimos que acceder caminando con nuestras tablas unos 20 minutos.
Al llegar allí, habían literalmente unas líneas perfectas, de unos 2 metros, dos coches 4X4 en la arena y 3 personas en el agua. ¡Yasssssssssss! ¡Nos tiramos más de 3 horas sin parar! ¡Que gustazo!
Tuvimos que salir del agua del hambre que teníamos, encontramos un Fish and Chips / gasolinera a unos 10 kilometro de la playa. Por la tarde y ya con el estómago lleno, volvimos a disfrutar de dos horas más de surf en auténtica soledad.
En formato caracol, cogimos la van y nos ‘pateamos’ una horita de coche hacia el norte hasta llegar a Brooms Head. Le pedí a Poppy pasar la noche allí. Lo hemos hecho en más ocasiones. Es un parque nacional impresionante, súper recomendable si viajáis por estos lares, en el que puedes dormir delante del mar y rodeada de canguros salvajes. El ranger apareció para el atardecer. El coste fue de $23 entre las dos, tuvimos que pagar al día siguiente porque no llevábamos cash. (hippie style) Sorry mate, we have no money!
A las 7pm era completamente de noche. Nos comimos cuatro dips y a dormir.
Amanecimos a las 5am. Los canguros junto a nosotras, disfrutaron de un magnífico amanecer a primera línea de mar. Lo primero que hicimos fue ir a depositar el dinero en el convenience store de Brooms Head. Es importante pagar los fees para que puedan mantener los parques nacionales.
A las 6am estábamos en Yamba. Un flat White para Poppy y un Long Black para mi, eso si take away. Fuimos a chekear las olas al Parque Nacional de Angourie. Pensé que la sesión del día anterior era imposible de superar pero me equivocaba.
La verdad es que Angourie estaba mucho más llenito. Quizás éramos unas 10 personas en el point pero las olas eran, de nuevo, literalmente perfectas. Ni grandes, ni pequeñas, líneas perfectas, glassy ass, buafffffff!
Tres horitas más de surf. Volvimos a repetir Fish and Chips pero, en esta vez en ILUCA y de camino a casa. Siempre nos paramos en este shop, la pescadería es de lo más cutre pero el pescado es fresco y las patatas estaban buenísimas. Súper recomendable. Si preguntas, es muy famosete.
Con los brazos reventados, volvimos felizmente a casa después de un fin de semana perfecto entre canguritos, olitas y muchas risas y, perfecto también, para mentalizarme ya que las próximas 5 semanas estaré trabajando desde Barcelona.
Sin olas, con zapatos, peinadita y comiendo no organic. Eso si, con la familia.
Family is the most important thing in life.
M.
